¡GRACIAS, DIOS MÍO¡

Gracias, muchas gracias a todas las personas que tuvieron la bondad de dejar sus comentarios en mi nota del 16 de noviembre. He leído con mucha atención todas las gentiles notas, y debo expresarles que han sido muy generosos, ya que son superiores a mis escasos méritos.
Me apena no poder responderles individualmente por lo cual lo hago colectivamente mediante de esta glosa. La mejor recompensa hacia ustedes serán siempre las oraciones a Dios, para que les dé permanente salud y bienestar.
Antes, hace muchos años, mis manos y dedos pulsaban rápida y ágilmente los teclados al escribir información acerca del acontecer de mi tierra, con destino los periódicos y noticieros radiales de la época.
Hoy, mis manos lentas y vacilantes, apenas si consiguen escribir unos cuántos párrafos en el sensible teclado del computador, de la tableta o del Smart Fon.
Esta, una delas razones por las cuales no me dirijo a todos y cada uno de mis apreciados contactos en las redes sociales.

¿Otro motivo?: Los momentos que estoy frente al computador los dedico a escribir algo muy importante que publicaré posteriormente en este medio de expresión: Una breve reseña acerca de un tema histórico que nos incumbe a todos, y que es necesario dilucidar de una vez por todas.

Posteriormente me referiré también a algo que nos apena. El morbo del olvido y la indiferencia para con nuestros antepasados que dejaron su huella en el pretérito histórico de nuestro pueblo.
Durante mi ya larga existencia- ¡Gracias, Dos mío!- conocí innumerables personas: mujeres, hombres ilustres y campesinos humiles, quienes con su acendrado espíritu cívico nos dieron ejemplo de vida, y soñaron un Cocorná próspero. Lucharon por la autonomía del municipio, dominado por el intervencionismo foráneo de la época, que tuvo anquilosado el desarrollo de nuestro pueblo.
Tuve la fortuna de conocer personalmente a muchos de estos personajes. Recuerdo su silueta, sus ademanes y hasta resuena su voz en mis oídos. ¿Cómo no recordarlos, si de ellos aprendí a amar a mi terruño?
Es a ellas y ellos a quienes debemos rendirles el homenaje de nuestro recuerdo, porque se han ganado un lugar en nuestro corazón y en nuestra historia.
Poseo en mis apuntes una lista considerable de sus nombres y algunas fotos que me propongo divulgar en mis notas de las redes sociales.
Pero, “Una sola golondrina no hace el verano” y por esto necesito la ayuda de todos mis paisanos. En consecuencia, les ruego a quienes recuerden algunos de los nombres de nuestros antepasados, a quienes han fallecido en los últimos años y si conservan fotografías de algunos de ellos, se dignen prestarme una copia, con carácter devolutivo, para engrosar el muestrario, que será patrimonio de la historia y también de ustedes.
Para terminar, cualquier observación o sugerencia serán bien recibidas en mi buzón electrónico: zartantinio@gmail.com WhatsApp o por cualquier otro conducto.
De antemano les expreso mis agradecimientos por el interés y colaboración en este propósito.

Principio del formulario